Una niña ha sido trasladada a la comisaría de Uztaritz, un pueblo
fronterizo con Irún en Francia, porque sus padres no habían pagado el
servicio de comedor del colegio, según informa el diario Sud Ouest.
Un policía municipal se personó en el comedor del colegio donde la niña
no pudo registrarse debido a los impagos, unos 170 euros, según ha
explicado al medio de comunicación el padre. La policía acompañó a la
niña primero hasta su vivienda, pero como sus padres no estaban, se la
llevaron a comisaría.
Según sus progenitores, la niña está "muy traumatizada por el
episodio." Cuando la policía vino a buscarla, ella pensó que "sus padres
habían muerto" o la iban a meter en la cárcel.
El padre de la niña ha pedido responsabilidades en el Ayuntamiento de
Ustaritz. El director de la escuela, que desconocía lo sucedido ha
elevado también una protesta al consistorio porque no acepta "que se use
a los niños como rehenes".
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